lunes, 15 de diciembre de 2014

Eres. Soy.

Eres un paseo por el Retiro en pleno invierno,
eres el edredón que me arropa cada noche,
señal de que estoy en casa.
Eres una sonrisa al despertar,
un te quiero al oído,
un "no te vayas nunca".
Eres un paseo bajo la lluvia sin paraguas,
un serranito cuando tengo hambre.
Eres una película Disney junto a mi madre,
una canción de Sabina.
Eres una cerveza junto al río,
el color verde de los árboles.
Eres un concierto de Andrés Suárez,
un viaje de noche.
Eres el Carnaval de Cádiz en febrero,
cada niño/a que me ha llamado "seño".
Eres la luna llena que destaca entre las estrellas,
un libro de Harry Potter, mágico.
Eres el reencuentro con un viejo amigo,
el Panteón de mi ciudad favorita.
Eres cada nota que sale de mi guitarra,
el gorro de colores que alegra los días nublados.
Eres la arena de la playa entre mis pies,
cada lunar de tu espalda.
Eres el abrazo de un desconocido,
eres Navidad.

Eres todo eso y por eso soy.
Soy, sin ti. Eres, sin mí.

Pero eres, con eso ya me basta.

viernes, 16 de mayo de 2014

La historia que nunca existió.

Estamos condenados a no ser nada,
a existir sin vivir,
a vivir sin sentir.
A sentir sin tenernos,
a tenernos sin apenas saberlo.

Después de tanto tiempo
sigo sin entender qué coño pasó con esa historia
a la que me da miedo llamar “nuestra”
porque realmente no existió,
aunque mi corazón se encargue día a día
de hacerme creer que así fue.

Deja de aparecer en cada canción
en cada sueño, En cada pareja,
en cada instante de tristeza.
Deja que siga adelante,
que complete mi vida,
que consiga olvidarme de tus ojos
de tu olor, de tu sonrisa.

Aun no entiendo por qué me fijé en ti
qué vi en ese chico tímido
que necesitaba que le recordasen cada minuto
lo importante que era en el mundo,
lo importante que era en mi vida.
Y quizás eso sea lo que echo de menos,
tus debilidades y mi afición a desvanecerlas.

Una habitación vacía,
una cama vacía,
un corazón vacío,
son las consecuencias de este amor
inalcanzable,
incoherente,
y a la vez desgastado.

Me tumbo en la cama,
que podría haber sido nuestra.
Me agarro a la almohada,
que podría haber sentido nuestro calor.
Cierro mis ojos,
que siempre serán tuyos.
Sueño,
que (des)apareces,
por fin.

lunes, 20 de enero de 2014

Valiente

Me gustaría ser valiente 
para poder decirte con palabras 
lo que con miradas intento,
para no llorar cada noche 
junto a mi almohada.

Me gustaría ser valiente 
para convencerme 
de que no todo lo que se desea 
se termina cumpliendo,
para dar la cara.

Me gustaría ser valiente,
valiente para estar a tu lado.

Me gustaría ser,
porque solo seré contigo.


Me gustaría.